
Es verano, pero para los profesores no siempre significa vacaciones. Necesitan asistir a programas de desarrollo profesional, buscar más recursos educativos para usar en sus aulas, etc. Pero tratar de hacerlo todo antes del otoño puede estresar a los maestros y hacerlos sentir abrumados en lugar de descansar y rejuvenecer sus mentes y almas.
Entonces, ¿cómo pueden los profesores aprovechar el verano, es decir, completar sus tareas mientras descansan lo suficiente para comenzar el próximo año con más energía? Aquí hay 5 consejos a tener en cuenta.
Índice de contenido
1. Reflexiona sobre tu experiencia de verano anterior
Esta reflexión te ayudará a aprender de tu experiencia pasada e identificar la brecha que falta, es decir, qué deberías estar haciendo y cómo hacer que tu verano sea más productivo. También te motivará a planificarlo de manera más efectiva para sentir la gran sensación de autorrealización. Estas son algunas de las preguntas que debe hacer:
- ¿Cómo pasaste el verano pasado? ¿Qué estabas haciendo la mayor parte del tiempo?
- ¿Qué querías hacer durante el verano y no hiciste? Por qué ?
- ¿Cómo te sentiste al final del verano?
2. Determina tus objetivos
Hay que tener la intención de que este verano sea único y diferente a los anteriores en cuanto a productividad. Pero lo más importante es tener una visión clara de lo que quieres hacer.
Entonces, ¿qué experiencias y logros quieres tener este verano?
¿Qué puedes quitarle?
Para responder a estas preguntas:
- Aclare sus prioridades de vida y carrera: concéntrese en objetivos específicos o resultados deseados para generar la atención y el compromiso necesarios para completar las tareas. Por ejemplo, si está pensando en un curso de desarrollo profesional en particular, una tarea del hogar, pregúntese: ¿realmente necesita tomar este curso o hacer esta tarea? ¿Hará alguna diferencia si decides hacerlo durante el verano?
- No dediques todo un verano a un solo objetivo: busca un resultado más rico en términos de ganancias personales y profesionales. Probablemente te motivará a trabajar más duro.
- No te centres en lo que hacen los demás (cómo pasan las vacaciones tus compañeros, amigos, padres): esto puede desviar tu atención y hacerte menos productivo. Concéntrese en USTED y piense en el cambio que sucederá este verano en su vida si lo usa productivamente.

3. Define tu “lista de tareas”
Después de determinar sus objetivos personales y profesionales, es hora de pensar en una lista de tareas pendientes. Esta lista solo contendrá las acciones que le permitirán lograr los objetivos relacionados con estas vacaciones de verano. Por lo tanto, serán diferentes de sus tareas diarias. Para hacer de su lista de tareas pendientes una mejor herramienta productiva:
- Evite una lista de tareas que sea demasiado larga: cuantas más cosas ponga, más probable será que se presione más, así que piense en las tareas más importantes que debe realizar cada día.
- Prioriza: al priorizar tus preguntas, determinarás qué acciones son importantes para tomar, permitiéndote enfocarte más en lo que es más relevante para tu vida personal y tu carrera.
- Estima la duración de cada tarea: esto te ayudará a administrar tu tiempo de manera más eficiente.
- Separe las tareas del hogar de las del trabajo: tener una lista que incluya tanto las tareas del hogar como las del trabajo puede ser difícil de armar.
- Use diferentes categorías para su lista: agrupar tareas en categorías puede ahorrarle mucho tiempo y energía en la fase de ejecución (a continuación se proporciona un ejemplo de dicha lista, pero es necesario especificar nuevamente estas tareas, es decir, el título de la lista). libro o incluso su capítulo, la tarea de desarrollo profesional, el tipo de material a buscar, etc.)
- Agregue algo de energía a su día: no se olvide de las tareas divertidas para relajarse y rejuvenecer.
4. Ponga su «lista de tareas» en su calendario
La implementación efectiva de su lista única de tareas pendientes requiere planificación. En este caso, la planificación implica alinear este tipo de lista con tu lista de tareas diarias, integrando así ambas listas en tu calendario. Pero, ¿cómo hacer esta alineación? Antes de responder el «cómo», primero abordemos la pregunta de «¿cuándo planificar»?
Programe su tiempo una vez a la semana para la planificación. La planificación semanal puede ayudarlo a concentrarse más en sus tareas diarias y evaluar su progreso al final de cada semana. Tómese el tiempo para pensar en su plan. Esto mejorará la eficacia y la eficiencia de sus acciones. Así que elige el día y la hora en que estés libre para ocuparte del siguiente proceso con más detalle:
Consulta tu lista de tareas diarias:
Decide qué puedes evitar hacer (márcalos) y qué elementos posponer (posponerlos). A continuación, prioriza los elementos que están en tu lista diaria y colócalos en categorías como 1) mi salud, incluyendo, por ejemplo, ir al médico, 2) mi familia: asistir a un evento familiar, 3) tareas relacionadas con la casa: limpieza y compra de productos.
Divide tu día en bloques de tiempo para cada categoría en las dos listas «la única lista de tareas pendientes y la lista diaria de tareas pendientes»:
Depende de la prioridad que le des a cada uno de ellos, la naturaleza y la duración estimada de cada tarea. Puede comenzar con tareas que son fáciles de completar y luego pasar a las difíciles y que consumen mucho tiempo. También puede decidir equilibrar las tareas de ambas listas, eligiendo una variedad de tareas para realizar de ambas listas cada día. Otra solución es dedicar todo el día a ciertas tareas relacionadas con una de las listas y luego concentrarse en las tareas de la otra lista al día siguiente. ¡Encuentre una manera que funcione para usted!
Utilice el calendario de Google:
Puede decidir usar una computadora portátil, un teléfono inteligente o una tableta para mantener su lista de tareas pendientes. Pero el uso de Google Calendar puede ayudarlo a organizarse mejor.

5. Evalúa tu progreso
Es importante revisar regularmente su progreso. Puedes hacer esto a diario, preguntándote: ¿qué hice/logré hoy?
Al final de cada semana, puede revisar todo lo que logró esa semana y lo que no pudo hacer, puede preguntarse: «¿Cómo puedo hacer que la próxima semana sea más productiva que esta? »
Esto lo ayudará a reevaluar su lista de tareas pendientes, su plan y su compromiso para lograr sus objetivos, lo que le permitirá planificar de manera más efectiva la semana siguiente. El objetivo de la revisión es hacerlo más proactivo (no reactivo) y desarrollar más flexibilidad para adaptar sus tareas programadas a su horario diario.
Otras sugerencias
- Mientras planifica, haga coincidir su lista con su tiempo y energía.
- Di no a todo lo que no coincida con tus prioridades.
- No se preocupe si no puede completar una tarea planificada, piense en el «por qué» y vuelva a planificar.
- Piense por qué pospuso los elementos de su lista de tareas pendientes.
- Adquirir hábitos útiles como levantarse temprano en la mañana, no revisar el correo electrónico constantemente, tomarse al menos un día libre a la semana de las herramientas digitales, etc.
- Recuerde reservar tiempo al final del día para pensar creativamente y relajarse.
- Use dispositivos de compromiso, que son cosas que hace para comprometerse a lograr sus objetivos. Esto podría incluir, por ejemplo, poner la alarma del reloj al otro lado de la habitación, mantenerse alejado de la televisión, programar una hora específica del día para las redes sociales, etc.
- Use una lista de tareas diarias para ayudarlo a descubrir qué omitir.